A los 81 años y con una salud delicada el superman de Nueva Rumasa sabe que no lo van a meter en prisión. Así las cosas José María Ruiz-Mateos se declara “único responsable de cualquier decisión final” del emporio de la abeja reina. El empresario pide ir a la cárcel hasta que cobren todos los inversores en pagarés. El azote de banqueros acusa al Popular y Santander de todos los males de sus negocios y les considera los verdaderos responsables de lo sucedido. La petición de ir a prisión es un circo mediático más, sin ninguna trascendencia procesal. Lo que no desvela el caradura de la abeja es dónde está el dinero que ha cobrado por presunta estafa a los suscriptores de pagarés.
Un intento más de eludir responsabilidades hacia sus hijos y ejecutivos. Entretanto los inversores no han solicitado medidas cautelares de prisión y recordaron que el juez Pablo Ruz ya rechazó el ingreso en prisión preventiva de tres de los seis hijos varones del fundador de Nueva Rumasa tras solicitarlo Joaquín Yvancos, abogado del grupo durante 27 años. Lo que quieren es cobrar…
Se busca la “huchita” de Ruiz-Mateos en Suiza
La Audiencia Nacional ha pedido ayuda a Suiza para encontrar el dinero negro que los Ruiz-Mateos podrían presuntamente haber depositado en el paraíso fiscal. El juez Pablo Ruz tendrá que vestirse de Sherlock Holmes helvético. Con el fraude de los pagares, los Ruiz-Mateos han captado más de 400 millones de euros. Nunca se sabrá el dinero negro invertido en Nueva Rumasa pero se tiene constancia de que más de 4.ooo inversores han perdido su dinero. Las informaciones publicadas por distintos diarios apuntan a que una gran parte de ese dinero se encuentra en cuentas del Deutsche Bank y Dresdner Bank en Ginebra. “Entre 400 y 600 millones (…). El juez considera ya probada la existencia en Suiza de lo que Ruiz-Mateos denominaba ‘la huchita’, dinero negro que se habría evadido para afrontar pagos inesperados o situaciones de crisis”, según distintos diarios económicos.
Por lo visto un sobrino de Teresa Rivero, Alfonso Barón Rivero, era el encargado de desviar el dinero. En la trama figura igualmente Rocío Ruiz-Mateos, y su marido, Luis Ojeda.
El cuarto de costura con fondo de armario…
El fiel abogado de Ruiz-Mateos ahora colabora con la Fiscalía Anticorrupción en calidad de testigo protegido, y ha asegurado que la familia escondía el dinero en un zulo localizado en la mansión de Somosaguas y al que se accedía desde el cuarto de costura de la mansión.
“Presuntamente” cada tres semanas se llevaba a Suiza un cargamento con 120.000 euros en coche.
Informa Alfredo Muñiz