En la comedia EL TESTAMENTO DEL GALLO, disponible en Amazon, Jazminciña llama a un exorcista para intentar sacar el demonio del cuerpo de su hija María Verónica Salomé. Sin embargo, el sacerdote no tuvo éxito en su invocación a la Virgen de Chamorro en El Ferrol; ni con las súplicas a San Caralampio, patrón de los borrachos y santo adorado en la iglesia de las conchas de la isla de La Toja. Esperemos que la Virgen del Carmen , patrona de los marineros, interceda para hacer recapacitar a las almas endemoniadas por los espíritus malignos que se apoderan de los humanos sin escrúpulos y que los guie a buen puerto.
A todas las Cármenes, Carmelas y Carmelos ninguneadas, engañadas e infravaloradas por sátrapas caciquiles les dedico este post. Siempre hay otra alternativa, y en los países democráticos como España se puede hacer uso de la Justicia para poner a cada uno en su lugar.
¡Que la Virgen del Carmen guíe a todas esas Cármenes y Carmelos que necesitan Libertad de opinión!
Para los católicos, apostólicos y romanos que van a misa de 12 los domingos, nuestra Señora del Carmen es la denominación de la Santa María del Monte Carmelo, una de las diversas advocaciones de la Virgen María. En Cuba otra advocación de la Madre de Dios es la Virgen de Regla; en Guaicanamar se edificó una ermita de mampostería donde se entronizó una imagen de la Virgen de Regla proveniente de España. En el sincretismo de la religión afrocubana de origen Yorùbá conocida como la Santería, la Virgen de Regla es asociada a Yemayá, la diosa de mar.
Los esclavos, también oprimidos, tuvieron que venerar a nuestra Virgen disfrazada de Yemayá. Ahora sus descendientes tienen que vencer al castrismo con su ayuda. Por fin, el pueblo cubano se ha dado cuenta de que ha vivido en una dictadura comunista desde hace más de 60 años; los oprimidos se han unido y salen a la calle para defender sus derechos y pedir la dimisión del gobierno dictatorial.
Volviendo a nuestra Virgen del Carmen, su veneración procede del Monte Carmelo, en Tierra Santa. Carmelo o Carmen derivan de la palabra hebrea Karmel o Al-Karem, que se podría traducir como ‘jardín de Dios’. De ahí viene la Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo, llamados carmelitas.
¡A la Virgen del Carmen, hoy le pido Justicia!, ¿Que se acabe el engaño y la manipulación caciquil a todas las Cármenes, Carmelas y Carmelos! y que el año que viene podamos brindar por un mundo más justo, sin dictadores, ni de izquierdas ni de derechas. Adiós a la censura, adiós a la limitación de la libertad. ¡Felicidades a todas las Cármenes, Carmelas y Carmelos!
Informa Alfredo Muñiz.
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