Un consejo de administración de una empresa familiar suele estar constituido entre tres miembros como mínimo y un máximo de doce consejeros.
En una sociedad de primos lo normal es que haya un representante en el consejo por cada rama familiar representada. Es decir, si hay tres hermanos de cada rama familiar, habría que nombrar tres consejeros, con independencia de que el padre o la madre fuera también consejero. Por tanto, se podría formar un consejo de 8 miembros. Respetando así la norma divina entre las Gracias y las Musas.
En la novela El testamento del Gallo, disponible en Amazon, existe un apéndice donde se desarrolla los distintos tipos de consejeros para poder llegar a la profesionalización de la empresa familiar y no incurrir en el pecado de colocar jarrones chinos…
De Vez en Cuando la Vida pone a cada uno en su lugar….
Informa Alfredo Muñiz.