En su día se rumoreo que el senador del PNV Iñaki Anasagasti difundía unas supuestas memorias del exsecretario de la Casa del Rey, Sabino Fernandez Campo. Según dichas fuentes el rey Juan Carlos I de España conocía con antelación que se iba a producir un golpe de Estado el 23 de febrero de 1981, y para celebrar el asalto al Congreso de los Diputados brindó con champán junto a sus familiares. ¿Qué hay de verdad y qué de cotilleo en tal afirmación?, ¿preferirá el monarca el champán al cava catalán?, ¿es verdadero dicho rumor?
Según las fuentes mencionadas Sabino Fernández Campo aconsejó al rey que condenara con rotundidad la intentona golpista liderada por Antonio Tejero Molina. El gran temor del general asturiano -asesor del Rey- era que la Monarquía volvería a desparecer de España. Al parecer, Fernández Campo exclamó con voz rotunda: “¡Señor!… ¿Está usted loco? Estamos al borde del precipicio y usted brindando con champán ¡Señor!, ¿no se da cuenta de que la Monarquía está en peligro? ¿No se da cuenta que puede ser el final de su reinado? ¡¡¡Recuerde lo que le pasó a su abuelo!!!”. Otras fuentes aseguran que Sabino no escribió esas memorias.
En cualquier caso sabemos de buena tinta que el general Sabino recriminó en multitud de ocasiones las salidas discotequeras de las infantas Elena y Cristina, y del príncipe Felipe por Palma de Mallorca, y les alertó que deberían casarse con la persona adecuada. Al tratarse de un matrimonio de Estado. Al final, el rey despidió a Sabino en un famoso restaurante madrileño, lo citó allí y le espetó en medio de la reina: «Sofía, no sabes que Sabino quiere dejarnos…».
Las advertencias de Sabino sobre la elección de consorte serán recordadas durante toda su vida por las infantas Elena y Cristina.
¡Ay, Dios mío! Si Sabino levantara la cabeza…
Informa Alfredo Muñiz.
