El cantante Bertín Osborne y el humorista Arévalo pasaron por una crisis afectiva porque Arévalo publicó en twitter, sin el consentimiento de su amigo Bertín, una imagen con el rey Juan Carlos y la infanta Elena comiendo paella -cocinada por Arévalo- en casa de Bertín. Ahora, como todo hacía presagiar, el culebrón termina con final feliz. Bertín Osborne perdona la vida a su íntimo amigo y hasta le invita a un concierto en Valencia para abrazarse y seguir recorriendo los teatros de España como hermanos. Pues vale, tanto pasteleo me empalaga. Después de la pataleta viene la exaltación de la amistad.
Bertín declaraba a la cadena que le da de comer: “Hay cosas que no se pueden hacer. Es mi casa y un amigo no hace eso. Es una falta de respeto a mí, a mi mujer, al Rey y a todos mis amigos que aparecen en la foto”.
Respecto al concierto, Arevalo -muy digno- dijo que no podía asistir porque se va de bautismo a Cádiz, así que tenemos pasteleo asegurado en Telecinco con la cacareada reconciliación.
De momento, para dar morbo al asunto, la mismísima María Teresa Campos se convertirá en mediadora en uno de los programas del cantante. “Mi casa es la tuya” es usada como plataforma para airear el tema de la paella de la discordia. Una líder de opinión como María Teresa opina sobre el asunto: “No me puedo creer que, después de tanto tiempo juntos, por una tontería de una foto…”. Bertín responde: “Lo adoro. Es como mi hermano. Pero no es una tontería”. Pues vale, con tal de crear audiencia ya vale cualquier cosa.
¿Quién aparece en la foto?
Además de el Rey Juan Carlos y la Infanta Elen, en la foto aparece la mujer de Bertín, Fabiola; las tres hijas mayores del cantante, Claudia, Alejandra y Eugenia con su marido, Juan Melgarejo, el empresario Pedro Ballvé, dueño de Campofrío, y el presidente de la Fundación del Tenis Madrileño, Carlos Almazán.