En el siguiente vínculo aparecen escaneadas la relación de polémicas facturas vinculadas al escándalo del Niemeyer destapado por el Gobierno de Francisco Álvarez-Cascos y relacionadas con el exdirector Natalio Grueso, contratado actualmente por la alcaldesa de Madrid, Ana Botella.
Un ejecutivo cultural con luces y sombras…
Es cierto que el exdirector del Niemeyer, Natalio Grueso, logró en un corto período de tiempo poner al Niemeyer en el mapa cultural internacional. Grueso contó en el proyecto de Avilés con la colaboración de figuras como el juez Garzón, Felipe González, Joan Manuel Serrat, Víctor Manuel, Woody Allen, Brad Pitt, Kevin Spacey, Paulo Coelho, Jessica Lange, Paco de Lucía, Barbara Hendricks, Yo Yo Ma o María Pagés, entre otros. No obstante, también es verdad que cometió errores en su gestión, como el cierre del Gastro motivado por los desencuentros con los Morán, en plena temporada de verano. Pedro y Marcos Morán rescindieron el contrato de concesión por diferencias con Grueso y su equipo. Por otro lado, existen otros asuntos más delicados de denunciar, según los rumores que pululan por
Asturias. Asimismo surgen evidencias sobre presuntas irregularidades cometidas por Grueso en el Niemeyer, según Foro Asturias (el partido de Cascos). Entre ellas se mencionan tickets de copas de ginebra con cargo al dinero público, viajes y otras facturas polémicas. Aunque la Justicia aún no ha dictado sobre quién tiene razón. Más información sobre el complejo conflicto del Niemeyer en este vínculo. La transparencia debe imperar como prioridad y quien gobierna debe denunciar ante los tribunales las irregularidades si alguien comete un delito. Las grandes dudas son: ¿existen demandas sobre el asunto o se tratará de una simple guerra política…? De momento, el ejecutivo ha sido «desterrado» de Asturias, ¿triunfará en el Madrid gobernado por Ana Botella? Veremos.
Los malos gestores despilfarradores serán castigados con una pena similar a la de malversación de caudales públicos
Entretanto el Gobierno está estudiando que los malos gestores que despilfarran los recursos públicos puedan ser castigados con una pena similar a la de malversación de caudales públicos, una tipificación que se incluiría en la reforma del Código Penal que acompañará a la Ley de Transparencia y Buen Gobierno, según han adelantado fuentes gubernamentales.
La Ley de Transparencia, que se quiere aprobar antes de que acabe marzo, recogerá sanciones a quienes incumplan los límites de déficit y endeudamiento que fije la Ley de Estabilidad Presupuestaria, a quienes comprometan gastos o asuman obligaciones sin crédito suficiente para su financiación, o a quienes eludan el reflejo contable de las obligaciones asumidas (facturas no contabilizadas). Como apliquen esta ley al dedillo con carácter retroactivo va a ser la monda lironda…
Informa Alfredo Muñiz
Enlace relacionado: Natalio Grueso, del Niemeyer a las Artes Escénicas madrileñas
