Como si se tratara de la Guerra de las Galaxias, las grandes potencias han creado ejércitos teledirigidos y comandados por robots y drones. Contra las máquinas se ha recurrido a un invento genial. La cofradía gallega de pescadores donó veinte toneladas de redes para que los ucranianos se protejan de los drones bomba rusos.
En las últimas horas, los ataques rusos provocan cortes de luz en siete regiones de Ucrania. Entretanto pese a las promesas electorales de paz promovidas por Donald Trump, las conversaciones sobre el fin de la guerra permanecen estancadas. Y los ataques contra las infraestructuras energéticas se han intensificado en ambos bandos causando penurias a la población.
Concretamente las regiones de Járkiv, Sumi, Poltava, Donetsk, Dnipropetrovsk, Zaporiyia y Kirovogrado permanecen con cortes de luz. Informa Alfredo Muñiz