Fernando Simón, el famoso director televisivo que nos informa sobre la evolución de la curva, dirige el Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias. Simón se ha negado a revelar la identidad de los miembros del equipo técnico que decide qué comunidades van a pasar de fase en el regreso a la “supuesta normalidad”. Por lo visto, se mantiene el anonimato del «servicio secreto anti covid» para que puedan trabajar con libertad y sin presiones. Aunque, el epidemiólogo ha facilitado alguna pista: es un equipo de 12 personas integrado por técnicos que trabajan en la Dirección General de Salud Pública. Y, por lo visto, la decisión final es del superpoderoso ministro de Sanidad, Salvador Illa, licenciado en Filosofía y ex alcalde de La Roca del Vallés. El ministro es hijo de Josep Illa, trabajador de la fábrica Textiles y Bordados de dicho municipio y María Roca, que poseía un pequeño taller textil. Parece ser que el ministro conoce bien la industrial textil catalana, no es de extrañar que a la hora de seleccionar a los proveedores se acuda a personas de “presunta” confianza: Escándalo en Sanidad: contrato millonario publicado en el BOE a una empresa textil con “dirección desconocida” . En realidad, el polémico contrato está firmado el 27 de abril de 2020 por el Director del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, Alfonso María Jiménez Palacios, se argumenta urgente necesidad para no solicitar más presupuestos o realizar un plazo informativo para que otros proveedores pudieran presentar otros presupuestos. Desconozco la forma de contratación para este tipo de contratos pero llama la atención que no se publique ni el CIF, ni la dirección del proveedor en un contrato de esta relevancia.
Sin embargo, según la ley de Salud Pública y la de Transparencia se obliga a publicar nombres e informes. ¿Estarán cubriéndose las espaldas ante posibles demandas ante el juez?, ¿en qué ley se basan para ocultar los nombres?
Sabemos que existen distintos comités de expertos que asesoran a los distintos ministerios pero se desconoce el nombre de los expertos y sus honorarios. Moncloa mencionó un comité científico con miembros de la Administración y algún representante de la universidad. Por otro lado, el ministerio de Ciencia también hizo referencia a otro grupo, todo ello con una gran oscuridad. ¿Qué ocultan?
La ley exige hacer público: «los procedimientos de selección, la declaración de intereses de los intervinientes, así como los dictámenes y documentos relevantes»
No obstante, dichos informes pueden facilitar los pleitos contra la Administración por sus presuntos errores… Así las cosas, el Partido Popular pedirá en el Congreso las actas y los informes de los comités «top secret» que asesoran al Gobierno amparándose en las leyes citadas, de Salud Pública y de Transparencia.
En el siguiente apartado vamos a jugar a hacer una quiniela con posibles nombres que podrían formar parte de dichos comités. Aunque ante la falta de transparencia, desconocemos si forman parte de un comité ejecutivo de expertos del Gobierno; del comité exclusivo del Ministerio de Sanidad; o quizá del Ministerio de Ciencia y Tecnología que ya anunció el ministro astronauta que empezó a trabajar el 28 de enero de 2020; o tal vez del comité para desescalada, o simplemente son nombres que en algún momento han colaborado con el Gobierno para una consulta puntual. ¿Cuántos comités de expertos se han constituido?
Declaraciones de Pedro Duque el 28 de enero de 2020: “estamos preparados para cualquier eventualidad. España esta preparada para hacer frente al coronavirus , estamos trabajando con profesionalidad y otorgando el liderazgo a los expertos en salud pública que tenemos en España”. Relacionado: Bendita hemeroteca: evolución de la crisis del coronavirus con las declaraciones de los “expertos” del Gobierno
¿Será algunos de estos nombres miembro del grupo de los 12 apóstoles anticrisis? Supuestamente, en el comité «top secret» participan tres profesores del Instituto donde trabaja la mujer del presidente Pedro Sánchez.
El secretismo de Estado ante los expertos que se encargan de gestionar la crisis del covid-19 es “misteriosa”. Aunque algunos nombres fueron facilitados en ruedas de prensa, por ejemplo la inserción de Manuel Muñiz Villa, licenciado en derecho y profesor del Instituto de Empresa, institución donde trabaja María Begoña Gómez Fernández, esposa del presidente del Gobierno Pedro Sánchez. Casualmente, Muñiz fue nombrado secretario de Estado de “España Global”, un organismo de nueva creación dentro del Ministerio de Asuntos Exteriores. ¿Para qué sirve? Algún día lo sabremos.
En las quinielas figuran otros dos profesores, compañeros de trabajo de la mujer de Sánchez, y por tanto procedentes del Instituto de Empresa.
Por un lado, suena Miguel Otero Iglesias, economista, especialista en “relaciones monetarias y financieras internacionales”. ¿qué tiene que ver con la medicina o la salud pública?
El otro profe es Angel Alonso Arroba. Licenciado en Periodismo y Antropología Social. Profesor asociado en el Instituto de Empresa. Trabajó como analista en el Open Society Institute. A principios de marzo le nombraron “Embajador en Misión Especial para la Ciudadanía Española Global”. ¿Qué sabrá de medicina y salud pública?
Las malas lenguas dicen que Podemos presionó para colocar a Pablo Iglesias en la comisión del Centro Nacional de Inteligencia en plena crisis del covid-19, además, presuntamente en la comisión de expertos del coronavirus, también se han colado dos militantes del partido de extrema izquierda. Por un lado, José Fernández Albertos, doctor en Ciencias Políticas, investigador del Instituto de Políticas y Bienes Públicos del CSIC y asesor del ministro de Seguridad Social. Especialista, según él, en “la intersección de la economía política y la política comparada”. Vinculado a Podemos. El otro miembro de extrema izquierda que supuestamente forma parte del grupo de expertos es Borja Barragué Calvo, otro filósofo como el ministro de Sanidad, profesor de Filosofía del Derecho en la UNED y colaborador de “El País”. Vinculado a la Universidad Autónoma de Madrid. Se presenta como “politólogo vinculado a la izquierda” y “especializado en desigualdad”. Relacionado: El marqués de Galapagar, de agustito en Vallecas a cojonudo en la comisión del CNI
Otros presuntos expertos de la supuesta quiniela:
Carlos Cuerpo Caballero, técnico Comercial del Estado. Director de Análisis Macroeconómico del Ministerio de Economía. Según la web de la Asociación de Técnicos Comerciales y Economistas del Estado está especializado en “seguimiento y análisis de los mercados de activos inmobiliarios y las pautas de endeudamiento del sector privado” ¿Qué tiene que ver con la medicina o la salud pública?
Diego Rubio Rodríguez. Licenciado en Historia. Nombrado por Sánchez director de la “Oficina Nacional de Prospectiva y Estrategia del País a Largo plazo”.
Diego Martínez Belio. Diplomático. Director del gabinete del secretario de Estado para la Unión Europea desde febrero de este año, un cargo muy menor dentro del Ministerio de AA.EE. Parece ser que ya colaboró con el ex ministro Miguel Angel Moratinos.
Bruno Sánchez-Andrade Nuño Astrofísico, trabajó becado en la NASA para “estudiar la superficie del Sol”, también estudia temas relacionados con el cambio climático.
¿Dónde están los expertos en epidemiología, en enfermedades víricas, en gestión hospitalaria, en logística, o en sociología?
También hay algún presuntos expertos de la supuesta quiniela relacionados con la medicina, aunque ¿se considerarán expertos en virología?:
Raquel Yotti Alvarez. Licenciada en Medicina. Directora del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), un organismo público, desde que la nombró el propio Sánchez en agosto de 2018. Tiene rango de Directora General en el Ministerio de Sanidad. Hasta entonces, jefa de Cardiología Clínica en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid, un cargo muy respetable pero no es experta en emergencia sanitaria de virus.
Manuel Cuenca Estrella, microbiólogo especializado en infecciones fúngicas (es decir, producidas por hongos, no por virus). También es licenciado en Historia y experto en “estadística médica”. ¿Manejará él el caos de cifras?
Carmen Artigas Brugal. Licenciada en Ingeniería Química y doctora en Ciencias Químicas. Secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, responsable de Transformación Digital. Parece ser que es experta en big data e inteligencia artificial y su tesis doctoral versó sobre “química cuántica y cáncer”. La mayor parte de su experiencia es en puestos oficiales vinculados al Ayuntamiento de Barcelona y a la Generalidad catalana.
Altos cargos socialistas médicos que supuestamente participan en el «sanedrín anti covid-19»:
Ana María García García, doctora en Medicina. Directora General de Salud Pública en la Comunidad Valenciana con el PSOE (2015-2019). Catedrática de Medicina Preventiva y Salud Pública de la U. de Valencia.
Antonio Plasencia Taradach. Licenciado en Medicina. Director General de Salud Pública en la Generalidad de Cataluña con el PSC/PSOE (2004-2011).
Miguel Angel Hernan, médico que da clases de epidemiología en la Universidad de Harvard. Licenciado en Medicina, profesor titular del departamento de Epidemiología y de Bioestadística de la T.H. Chan School of Public Health de la Universidad de Harvard. Trabaja en “la prevención y tratamiento de enfermedades infecciosas, cáncer, enfermedades cardiovasculares y psicosis”.
Y la gran pregunta. ¿cuánto han cobrado todos estos fenómenos por el trabajo realizado? Informa Alfredo Muñiz. Relacionado:
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