LLORAR POR HERMANA y SENTIR POR CUÑADA…
¿Qué le pasa al excuñado de la reina Letizia, Jaime del Burgo?
Inexplicable el comportamiento de dos personas de confianza de la reina Letizia, y más asombroso es que las dos pesadillas de la esposa de Felipe VI hayan sido sus abogados personales de soltera. Su primo letrado y su amigo íntimo licenciado en Derecho conocen al detalle las extensas capitulaciones matrimoniales firmadas por la plebeya y un Heredero al trono de España, antes de que contrajeran matrimonio. ¿Habrán firmado cláusulas de confidencialidad?
Por un lado, Jaime del Burgo, ex marido de Telma Ortiz (hermana de Letizia) no tiene pelos en la lengua y, pese a que actualmente Jaime del Burgo está casado con Lucía Díaz Lijestrom, el empresario ha contado intimidades en las redes sociales que parece no venir a cuento, si desconocemos los entresijos que hay detrás del escándalo.
Jaime del Burgo, hijo del expresidente de la Comunidad Foral de Navarra y ex diputado del partido Popular de Navarra, ha confesado a Jaime Peñafiel asuntos íntimos de su relación con la reina de España, aunque lo más sorprendente ha sido una publicación en X (antes Twitter) donde desvela un mensaje privado: «Amor. Llevo tu pashmina. Es como sentirte a mi lado. Me cuida. Me protege. Cuento las horas para volver a vernos. Amarte. Salir de aquí. Tuya», el texto figura junto a una fotografía de Letizia. ¿Ha sido la esposa del Borbón infiel?
DICEN y DECIMOS QUE MAS VALE UN HERMANO QUE DIEZ PRIMOS, depende, porque a los hermanos y a los primos se les conoce en las herencias y en las dificultades
David Tejera es el padre del primer hijo que abortó la princesa Letizia, según su primo Rocasolano
Un detalle que ha pasado inadvertido por los medios es la identidad paternal del feto abortado por Letizia Ortiz de Borbón en su época de «soltera -divorciada». Todo el mundo piensa que podría haber sido un hijo de su primer marido, Alonso Guerrero. Sin embargo, el autor del libro «Adiós, princesa» desvela que fue un novio que tenía Letizia antes de casarse con Felipe de Borbón. Así lo cuenta David Rocasolano: «Por las fechas de interrupción de su embarazo, supuse que el padre de la criatura había sido el periodista David Tejera». Asimismo, el autor explica que tiempo después, se enteró que «Letizia había actuado a espaldas de David a quien nunca confesó su embarazo». La interrupción voluntaria del embarazo se realizó justo un año antes del anuncio del compromiso matrimonial de la periodista con el hijo del rey Juan Carlos. No obstante el periodista desmiente a David Rocasolano vía Twitter.
David Tejera fue el novio oficial de Letizia Ortiz cuando comenzó su relación con el príncipe. Las malas lenguas cuentan que Letizia y David vivían juntos y Tejera se enteró del flechazo principesco por el telediario. Desde entonces tan sólo ha realizado escasas declaraciones referentes a aquella relación: «Yo he tenido mucha suerte en la vida sentimental a partir de ahí y lo tomo hoy como una anécdota. Cuando ocurrió sólo tuve tres posibilidades; adularla mintiendo; decir la verdad y, por tanto, hablar mal y quedar como un rencoroso resentido, y dejar que cada cual saque sus conclusiones. Fue ésta la que escogí. Ni la he adulado, ni la he criticado con rencor; creo que es lo más honesto que podía hacer», espetó en una entrevista. Ahora quizá se haya enterado por el libro «Adiós, princesa» que podría haber sido padre…
¿Quién sería el autor de este regalo con sorpresa que vio interrumpida su entrega?
En el libro se publican los documentos de la clínica donde se realizó la interrupción voluntaria del embarazo y según Rocasolano los príncipes le encargaron que destruyera el rastro de dicho expediente que podría haber impedido la boda del Heredero. La Iglesia desvela que Letizia tal vez se confesó con Rouco Varela: ¿Habrá confesado la princesa Letizia su pecado de aborto? Se imaginan ustedes a Rouco escuchando el pecado abortista de la princesa. ¿Qué penitencia le impondría para perdonar su excomunión? Independientemente de que se sea partidario o no del aborto, ¿cómo hubiera actuado la Iglesia ante la boda si se hubiera destapado el asunto públicamente?, ¿está al alcance de cualquier plebeya la confesión ante un obispo para poder indultarla? Recordemos que un cura ordinario no está facultado para perdonar la excomunión automática que supone el haber abortado, según el derecho canónigo. Por otro lado, ¿hubieran aceptado los Reyes el enlace de su hijo con una plebeya divorciada y partidaria del aborto?
Letizia Ortiz Rocasolano pagó 240 euros (39.932 pesetas) por abortar en la Clínica Dator de Madrid con fecha de la factura 27 de octubre de 20o2, según la documentación del libro «Adiós princesa». Asimismo, pagó 60 euros por dos ecografías para determinar su estado gestacional, las fechas de las facturas de las ecografías son el 13 y el 20 de octubre de 2002, según las mismas fuentes. Sobre las causas que motivaron a Letizia someterse al aborto de momento son un misterio. Un año más tarde, el 1 de noviembre de 2003 se anunció por sorpresa el compromiso matrimonial de la periodista con el príncipe. La petición de mano se produjo el 6 de noviembre de 2003, y la boda de Estado se celebró el 22 de mayo de 2004 en la Catedral de la Almudena de Madrid. En este momento, Letizia Ortiz Rocasolano se convirtió en princesa de Asturias.
Las críticas han sido devoradoras contra el presunto libelo, según algunos medios. Sin embargo, hasta la fecha no ha habido ninguna denuncia sobre lo publicado. Los grandes medios de comunicación no han prestado especial atención al polémico contenido escrito por David Rocasolano. Aunque el bombazo del libro es la revelación de un aborto por parte de Letizia un año antes de casarse con el príncipe. También se rumorea que hubo presiones por parte de Zarzuela para que el asunto no se convierta en noticia del circo mediático de «Sálvame».
El resentimiento del exabogado de Letizia es evidente. La indiscreción al contar los trapos sucios de la familia hace merecedor al primo traidor de calificativos como miserable, aprovechado o rencoroso para algunos que presumen de ética. Aunque los detalles también demuestran la hipocresía de los «borbones» (el autor lo escribe con minúsculas), desde el punto de vista del pariente Rocasolano. Sin duda debe ser deprimente adquirir la obligación de ser el primo de Letizia y no poder aprovecharse de sus ventajas en tiempos de crisis. Seguramente Rocasolano soñó convertirse en millonario gracias al tráfico de influencias o a la ayuda de su prima. Por lo visto, el abogado terminó en una decadente situación provocada por los recortes como tantos españolitos que se desesperan por llegar a fin de mes. Ante las circunstancias vislumbró una salida contando las miserias de su prima e incluso utilizando la muerte de Erika como justificación de su obra. DE LOS PARIENTES Y EL SOL, CUANTO MAS LEJOS, MEJOR.
Informa Alfredo Muñiz
Luego, me comentarán que la comedia EL TESTAMENTO DEL GALLO, escrita por Alfredo Muñiz y disponible en Amazon parece realidad… Encárguela como regalo de Navidad.
