Elegante, guapa y con gracia respondió Samantha Vallejo-Nágera a todas nuestras preguntas. La MasterChef además de buena comunicadora tiene un talento innato para los negocios y el buen gusto, eso se palpó durante la entrevista al GASTRODIARIO parahoreca.com. Durante nuestra charla Samantha hizo publicidad de su cátering y de su finca para bodas en Segovia, y de su pulsera con inspiración gastro para foodies, entre otros.
Descubrimos que no le gusta rizar el rizo con los temas de maridaje de quesos, vino y aceite, aunque se decanta por el Picual. Los maridajes de vino lo deja para su marido que es un experto en el asunto. Además nos cuenta que a diario comen guisos de «cuchara de palo» -refiriéndose a la cocina tradicional- y los fines de semana se pegan algún homenaje más refinado. Le encanta la decoración y tiene las ideas muy claras.
De una apuesta de cocina a MasterChef
Samantha comenzó en la cocina por una apuesta tonta, hizo sus pinitos nada menos que en la cocina del Restaurante Horcher de Madrid y se quedó dos años en uno de templos más chic de la capital del reino. De allí se marchó a Londres para trabajar con el florista Robert Day. Luego pasó por la escuela de cocina de Paul Bocuse en Lyon. También practicó y aprendió del arte culinario de Juan Mari Arzak en San Sebastian. Luego vivió su experiencia americana trabajando en Nueva York donde en decoración de eventos con Antony Todd. A la postre, decidió montar su propio catering y así nació «Samantha de España». Desde 1995 trabaja en Madrid. Todo un lujo merecedor de ocupar un puesto de honor en nuestra revista. Además de su faceta de empresaria, sabemos que está casada con un auténtico experto en vinos, y por encima de todo Samantha es una madre estupenda, en las redes sociales demuestra la ternura y el amor hacia sus hijos. Informa Alfredo Muñiz.