La abuela de la reina Letizia no quería perderse la ceremonia de ver a sus nietas ante la Virgen de Covadonga, patrona de Asturias. Menchu Álvarez del Valle vive una vida tranquila entre Marbella y Asturias, a sus 91 años goza de buena salud y una de sus mayores alegrías fue la visita oficial de su nieta al Principado. Menchu es una gran embajadora de Asturias, tras una intachable vida profesional como locutora de radio, disfruta de su jubilación en un pueblecito asturiano cerca de Ribadesella. Con motivo del día de la Santina, vistió sus mejores galas para ir a la ceremonia de la gruta, acompañada de su hijo Jesús Ortiz y su actual esposa Ana Togores. Con orgullo y emoción saludó a sus bisnietas la princesa Leonor y la infantita Sofía. A quien no se vio por el Santuario fue a su hija Henar Ortiz, tía de Letizia, la diseñadora-decoradora-estilista manifiesta frecuentemente su republicanismo en las redes sociales.
Tras la misa, la Royal Family junto a las personalidades asistentes acudieron a un cóctel en los salones del hotel Pelayo, donde se celebraron tantas bodas plebeyas asturianas. Más tarde, los Borbón y los Ortiz se retiraron para almorzar en la intimidad, después de bendecir la mesa ante la Santina. Además de los platos típicos asturianos, suelen elegir pescado en sus visitas a Asturias, y seguro que tenían una buena selección para la ocasión. Una siestecita y a cambiarse para subir a los lagos de Covadonga, aunque la abuela decidió quedarse en el hotel Pelayo. Besitos y a Madrid a dormir. ¡Qué agotadora agenda!, menos mal que al día siguiente era domingo y pudieron dormir la mañana.