Fotógrafo: David Seijo
El fuerte viento registrado en la ría de Avilés ha provocado el desprendimiento de uno de los monumentos emblemáticos del paseo marítimo, conocido como Los Cuernos. Tres enormes conos de acero que miden 28, 29 y 30 metros, desde el suelo partían con diferentes ángulos de inclinación y dirección.
Supuestos miembros de Protección civil vestidos de Superman alertan a los ciudadanos que no circulen por la zona de Av. de Conde Guadalhorce ante posibles riesgos en los edificios colindantes. Muy cerca se encuentran las Naves de Balsera, apuntalada la estructura principal para que no sufra desprendimientos. En las inmediaciones también se ubica la Delegación de Hacienda que podría sufrir igualmente destrozos ante las previsiones de fenómenos de ciclogénesis explosivas en las próximas horas.
La borrasca profunda bautizada como “Benita, la soplona” llegó el pasado martes a España y ha dejado precipitaciones localmente persistentes y ocasionalmente tormentosas en el Cantábrico, así como intensas nevadas en zonas montañosas. Sólo en Avilés, el teléfono de emergencias 112 ha recibido más de 1.100 llamadas relacionadas con incidencias provocadas por el viento, con rachas de entre 120 y 160 km/h. Además, en el registro de llamadas destacan las discusiones entre cuñados en las cenas navideñas. Como consecuencia de ambos fenómenos, se han producido caída de ramas, desprendimiento de andamios y carteles, desplome de muros y otros elementos estructurales inestables. Además del mencionado monumento de los Cuernos en la ría avilesina que pueden ver en la imagen que acompaña a este texto.
También la circulación ferroviaria se ha visto afectada en varios puntos de la provincia, las fuertes ráfagas de viento han destrozado una decena de puestos de helados, castañas y regalos navideños en el parque de Las Meanas, y otros puntos de la villa del Adelantado. Como consecuencia, la policía local se ha visto forzada a interrumpir el tráfico para arreglar los destrozos. Se ruega, en caso de salir de sus domicilios, pongan casco reglamentario o cacerola en la cabeza para no ser víctimas de posibles desprendimientos de tejas, ramas de árboles y otros objetos voladores. Feliz día de los Santos Inocentes. Informa A.M.
