Gastos y pagos con tarjeta Visa sin justificar; una minuta de 299.000 euros por tres contratos al despacho del exadministrador del Niemeyer, José Luis Rebollo -ya cobraba un sueldo millonario-. El exdirector Natalio Grueso se fundió 182.616 euros bebiendo cafés y copas en el restaurante del Niemeyer, son algunas de las evidencias que ahora salen a la luz en el informe de auditoría correspondiente al ejercicio 2011. Falta por revisar la contabilidad de los años precedentes y aclarar el destino de los millones de euros subvencionados.
PARAHORECA.COM denunció en repetidas ocasiones irregularidades en el Centro Niemeyer desde hace años, recuperamos una de las noticias gastronómicas con un pastel ilegal solicitado presuntamente por un miembro de la antigua dirección.
Aún quedan muchas dudas en el aire. ¿Se ha malversado dinero público? Si eso es delito por qué no se ha denunciado. ¿Debería actuar de oficio el Fiscal General del Principado? Por lo visto, el administrador concursal y el patronato tienen potestad para presentar una denuncia y exigir responsabilidades. ¿A qué se espera?
¿Sectarismo político, presunta corrupción o una gran dosis de desvergüenza?
El Gobierno de Cascos señaló que, en 2007, sobre un gasto de 500.026 euros, la partida destinada a viajes, hoteles y restaurantes ascendió a 120.165 euros. En 2008, sobre una cuantía de 580.267, subieron hasta los 363.576. Y en 2009, sobre un total de 501.910, alcanzaron los 131.172. Asimismo los casquistas denunciaron que de los 45 millones de euros gastados en el proyecto, una parte no contaba con facturas que justificaran los gastos correctamente. ¿Es normal este despilfarro amparado por los Gobiernos socialistas del expresidente Vicente Álvarez Areces; de la alcaldesa Pilar Varela, y con subvenciones millonarias otorgadas por el Ejecutivo Zapatero? Informa Alfredo Muñiz
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Guerra entre los cocineros Pedro y Marcos Morán con el Niemeyer
Sorprende que los ex gestores del Niemeyer acusen ahora a los Morán de incumplimientos, después de los halagos recibidos sobre su gestión. La Fundación del Niemeyer sostiene que el 3 de noviembre pagó a los Morán 10.000 euros por la liquidación pendiente. Según los exgestores se les debería tan sólo unos mil euros siempre que emitan la factura correspondiente. La gran duda es si liquidaron las facturas de la fiesta que se sirvió a Brad Pitt en el Faro de Avilés. Al parecer esa cena ya está pagada con dinero público pero existen otras comidas y bebidas con cargo institucional para «reuniones» presuntamente privadas…, al menos eso es lo que desvela a parahoreca.com un confidente conocedor de lo ocurrido.
¿Reuniones pagadas con dinero público para asuntos privados?
¿Quién acudió a dichos encuentros y qué se consumió en los mismos?, ¿hubo fiestas de cumpleaños de directivos pagadas con dinero público?, ¿se pidió un pastel de marihuana para celebraciones especiales con cargo a los gastos del Centro Cultural?, ¿quién consumió sustancias ilegales en las escaleras de emergencia del centro?, ¿hubo maltrato a los trabajadores por parte de los antiguos gestores?, ¿existen fotografías que evidencian algunos de las presuntas irregularidades?, ¿qué ocurrió en la cena organizada la víspera de la inauguración del Niemeyer?, ¿fue invitado el expresidente Vicente Álvarez Areces a dicho banquete preinaugural?, ¿donde dormían las presuntas moñas los fiesteros tras las largas noches con barra libre?, ¿hubo fiestas privadas en el Faro de Avilés? En caso afirmativo, ¿quién asistió y con qué dinero se financió a las presuntas «animadoras»?, ¿hubo alguna relación cultural con el Casino de Montecarlo?
Todas esas preguntas se formulan ante los rumores y filtraciones que llegan a nuestra redacción en parahoreca.com, la mayoría testimonios que proceden de testigos directos. La Fundación Niemeyer debería dar una explicación sobre el asunto que enturbia el nombre de la noble institución. ¿Se trata de simples cuhicheos, calumnias o presuntos delitos? Las acusaciones sobre excesos de copas con cargo al erario público ya fueron destapadas por miembros del Gobierno de Foro Asturias. ¿Se considerarán gastos de representación o despilfarro con cargo al proyecto cultural?, ¿es ético dicho comportamiento?, ¿se ha abierto una investigación que esclarezca el asunto? De momento, el Gobierno de Cascos pidió que se realizara una auditoria independiente. ¿Por qué se frenó la realización de dicha auditoría?
¿Intentará la Fundación Niemeyer poner disculpas para no pagar?
La falta de sintonía entre los cocineros Pedro y Marcos Morán con Natalio Grueso, y su equipo gestor en el Centro Cultural Oscar Niemeyer, fue la tónica dominante durante el período que duró la concesión. Las desavenencias fueron constantes en los temas gastronómicos. Presuntas disputas de los gestores del Gastro con Grueso, contratado actualmente por la alcaldesa de Madrid Ana Botella, y con sus subordinados Joan Picanyol y Jose Luis Rebollo. Además el Gobierno de Cascos denunció multitud de irregularidades en la gestión de la Fundación Niemeyer, falta por aclarar dichas acusaciones. En cualquier caso, uno de los asuntos pendientes era liquidar las deudas contraídas por el Centro Cultural con la familia Morán, entre otros pagos pendientes a proveedores. Ante el retraso y la falta de concreción de la deuda, la saga de cocineros con estrella Michelin ha decidido llevar a la polémica Fundación ante los Tribunales de Justicia para reclamar 26.000 euros. Pese al desastre provocado, la institución fundacional lleva meses retrasando la reunión del patronato. Ahora argumentan que esperan a que se decida el Gobierno regional de Asturias para aclarar los múltiples temas en el aire.
En un principio, los Morán emitieron una diplomática nota de prensa conjunta con el centro Niemeyer. Entonces se pretendió cerrar el asunto pacíficamente y Natalio Grueso consideró a los Morán «los restauradores más prestigiosos de Asturias y que han hecho un excelente trabajo en la puesta en marcha de los espacios gastronómicos del Centro Niemeyer». Sin embargo, tras su marcha y a la hora de pagar, las cosas han cambiado. Ahora la Fundación al no tener liquidez considera que los hosteleros incumplieron su contrato y justifica la falta de pago en la ausencia de facturas.
Por su parte, los Morán reclaman al Niemeyer el pago de unos 26.000 euros. Por un lado, 15.000 por los servicios prestados con motivo de la inauguración del complejo: catering, comidas y bebidas varias (con barra libre incluida). Así como los 11.000 euros que se gastaron en inversiones para poner en marcha el servicio gastronómico. Incluso hay quien apunta que podrían tener una carta bajo la manga y exigir una indemnización de 50.000 euros. Dicha posibilidad estaría pendiente de ejecución en función de que se liquiden las deudas reseñadas.
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El trabajo y profesionalidad de Morán Gastronomía han permitido poner en marcha en un tiempo record todos los espacios gastronómicos del Centro, y han sido los mejores embajadores que un Centro Cultural de relevancia internacional pudiera imaginar. La innovadora idea de considerar a la gastronomía parte de la cultura, y como consecuencia, parte fundamental del Centro, aconseja que el equipo directivo la explote de forma directa, tanto a nivel económico, como cultural, y con ello seguir caminando en el objetivo de excelencia y autosostenibilidad que guía todas las actividades del Centro Niemeyer.Por otra parte, la dirección del Centro no olvida que, hasta que no se acuerde la cesión de las instalaciones, la prudencia en relación a la contratación con terceros debe gobernar su gestión, por lo que debe orientar su actuación tan solo en el horizonte de final de año, lo que imposibilita a posibles concesionarios externos asumir inversiones que necesitan un plazo más amplio para poder ser rentabilizadas.
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