A la entrada Alberto Domínguez, conocido por todos como Berto, nos sorprende con los pescados y mariscos más grandes del mercado. La cocina destaca por su sencillez respetando los sabores naturales.
Probamos un delicioso caldo gallego y un virrey a la brasa estupendo, servido con ajos confitados y verduritas a la parrilla. De postre piña al horno. Otro día degustamos unas zamburiñas y navajas a la plancha para quitar el sentido, y unos calamares encebollados inolvidables. Para rematar nos sorprendieron con un mousse de queso de tetilla con compota de manzana. Todo ello maridado con albariño y champán francés. Con ganas de volver. Anota: «D´Berto, una marisquería altamente recomendable para visitar en tu paso por La Toja», informa Alfredo Muñiz.