La Antártida es un continente desértico y remoto donde solamente se puede acceder con barcos rompehielos. Una zona despoblada que parece el fin del mundo, allí solo se encuentran los pingüinos, los osos polares y la escasa fauna capaz de soportar las bajas temperaturas, los icebergs y las escasas bases científicas, menos de 50 bases internacionales. Por todo ello, sorprende la noticia de que se haya detectado un brote con 36 casos de infectados por el covid-19. Los contagios se confirman tras la visita a la base del buque Sargento Aldea de la Marina chilena. Por lo visto, tres de sus más de 200 tripulantes dieran positivo al realizar las pruebas PCR.
Hasta ahora la Antártida era el único continente del planeta Tierra que había permanecido libre de coronavirus. Desgraciadamente con la llegada de la Navidad recibimos la triste noticia de que el virus ha llegado a una base militar de Chile que presta apoyo a todo tipo de investigaciones científicas. La llegada del coronavirus al continente helado es realmente muy complicado, dada la incomunicación con el resto del mundo. Desde el pasado mes de marzo el escaso turismo que lo visitaba ha quedado suspendido. El Ejército chileno informa en un comunicado de que 26 militares y 10 civiles que trabajan como contratistas en la base Bernardo O’Higgins Riquelme (BAE) dieron positivo y se encuentran «aislados» en Punta Arenas, una ciudad del sur de Chile. Informa Alfredo Muñiz.