La campanada gastronómica del Gobierno de Cascos con after work y brunch
La crisis provoca recortes en los proyectos culturales públicos y el Gobierno de Rajoy no dispone de fondos para ideas faraónicas. Así acaba de desvincularse de la Isla de la Innovación que pretende el desarrollo urbanístico en torno al Niemeyer.
Una de las batallas emprendidas por el presidente Francisco Álvarez-Cascos en los últimos meses se centró en destapar las presuntas irregularidades detectadas en facturas del Centro Cultural Niemeyer en Avilés, dirigido por Natalio Grueso, recién contratado por Ana Botella como gestor cultural del Ayuntamiento de Madrid. En la relación de facturas figuran gastos de dudosa justificación y enorme despilfarro, según los representantes de Foro Asturias.
En el sprint final de la lucha por la presidencia del Principado, el Gobierno de Cascos concede la concesión gastronómica al chef Koldo Miranda. Lo cual levanta una corriente de posturas contrapuestas. Unos alaban la profesionalidad del cocinero seleccionado, mientras otros opinan que al tratarse de un Gobierno en funciones se debería esperar a las elecciones autonómicas para decidir el futuro de la hostelería del centro. La concesión se encuentra disponible desde el pasado mes de agosto, fecha en que Pedro y Marcos Morán decidieron rescindir el contrato anterior.
Cascos criticó los gestos gastronómicos del PP aprendidos del PSOE
Lo curioso del asunto es que la noticia surge después de una semana de críticas a las visitas de distintos líderes nacionales del PP, Cascos considera el asunto una especie de “turismo gastronómico-viajero”.
Pulpo asturiano para un gallego
Así el presidente gallego Alberto Núñez Feijoo arropó a la candidata del PP en Asturias, Mercedes Fernández, pese a la amistad demostrada a su querido Paco Cascos, antes de la ruptura con el Partido Popular. Cascos ironizó sobre su presencia en Asturias y criticó que en la foto se viera al presidente gallego ”con siete palillos en la mano, supongo que comiendo chorizos a la sidra y no pulpo”, según Cascos. Pese a la ironía del presidente de Foro, en realidad se trataba de pulpo. El presidente de Cantabria Ignacio Diego también arropó a la candidata popular, igual que Mariano Rajoy, Dolores de Cospedal, Ana Botella, Cristóbal Montoro y un largo etcétera. Hasta Soraya Sáenz de Santamaría, pronunció unas palabras por videoconferencia porque no pudo aterrizar su avión el día del mitin. Ante los hechos, Cascos remarca ”las visitas de famosos” que programa el PP “cada vez con más intensidad” en las que, a su juicio, los ministros reproducen “el turismo gastronómico-viajero” que ha puesto “de moda” el candidato socialista, Javier Fernández, al recorrer en seis días los 78 concejos del Principado.
La campanada gastronómica del Gobierno de Cascos
Koldo Miranda será el nuevo concesionario del proyecto gastronómico del Niemeyer. El cocinero que en su día fue merecedor de una estrella Michelin prepara una sorpresa gastronómica muy asturiana. La terraza, el mirador de la torre y la mesa corrida volverán a convertirse en espacios de arte culinario. La famosa cocina de la torre fue inaugurada por Juan Mari Arzak, sus platos estrellas fueron clonados por Pedro y Marcos Morán. Ahora Koldo Miranda proyecta crear un taller de creación orientado especialmente a la cocina asturiana. En la torre se organizarán talleres didácticos, y acudirán grandes maestros de los fogones de todas las culturas, en especial asturianos e iberoaméricanos.
Koldo apuesta por la tendencia del after work y del brunch
La gran innovación de la propuesta de Koldo Miranda será un after work en la zona mirador. En las series americanas Friends o Ally McBeal los colegas de trabajo suelen reunirse después de la rutina laboral para tomar algo entre amigos. Estos lugares se preocupan por una estética fashion,música o la posibilidad de ver partidos de fútbol, tenis o baloncesto en una pantalla gigante. En Nueva York fueron bautizados como after works que significa ‘después del trabajo’. Por lo visto, en su after work Koldo Miranda ofrecerá cócteles, aperitivos asturianos y los tentempiés japoneses.
En la terraza del Centro Cultural el cocinero ofrecerá brunch, una opción también nacida en Nueva York, especial para los domingos y días de fiesta. El brunch se sirve a partir de las 12 de la mañana para aquellos que se levantan tarde o van a hacer deporte y luego unen desayuno y almuerzo, de ahí el origen de la palabra, conjunción de breakfast y lunch.
Por lo demás el nuevo chef del Niemeyer apuesta por una cocina sana, ecológica y libre de grasas; con platos para niños y tapas asturianas para el vermú.
Informa Alfredo Muñiz
