El gel hidroalcohólico no se recomienda usar en la playa porque puede provocar quemaduras; mucho mejor lavar las manos con agua y jabón o echarlo al final de la jornada playera. Tampoco es aconsejable utilizarlo en cócteles. Lo que oyen. En la cárcel de mujeres de Brians, en Barcelona, un grupo de reclusas inventaron los cubatas con el gel hidroalcohólico. Al darse cuenta los funcionarios, tuvieron que retirarlo. Las presas compraban en el supermercado del establecimiento penitenciario el refresco de cola y lo mezclaban con el gel para matar el coronavirus. Las cuchipandas se organizaban en la biblioteca penitenciaria.
Así las cosas, la cárcel de mujeres ha tenido que tomar medidas para evitar las borracheras etílicas con el remedio contra el covid-19. Por supuesto, la ingesta de gel hidroalcohólico puede provocar intoxicación.
El gel se había instalado en las zonas con más riesgo de contacto, por ejemplo en las cabinas de teléfono y también en las salas de vis a vis.
Al parecer, algunos reclusos están acostumbrados a elaborar bebidas de baja graduación alcohólica con restos de comida. Por lo visto, dejan fermentar la fruta, y le añaden dios sabe qué que se convierte en alcohol. Miedo me dan esas recetas. Informa Alfredo Muñiz.